Si piensa visitar un país en el que nunca ha estado, deberá informarse bien sobre él, sobre todo por motivos de seguridad.
En cuanto a la salud, no hay nada grave de lo que preocuparse.
Cabo Verde no suele tener un alto riesgo de enfermedad. En las estaciones lluviosas (de agosto a noviembre) y en zonas como las islas de Santiago y Boa Vista, los mosquitos pululan, creando una oleada de enfermedades en la región. Se trata esencialmente de malaria, que no es muy alarmante. La población no se asusta mucho por ello, ya que estas zonas no son endémicas. Una mosquitera debería protegerle de esta desagradable faceta. No tiene sentido dejar pasar la oportunidad de visitar Cabo Verde gracias a la Preinscripción EASE por esta razón.
Zonas de riesgo, como en todos los países
Como en la mayoría de los países, algunas ciudades son más o menos peligrosas. Con el desarrollo de diversas formas de tráfico en ciertas zonas, las calles se han vuelto arriesgadas en algunos lugares. En la isla de Santiago, en Praia, se han registrado varios asaltos y varias personas han resultado muertas. Desaconsejamos encarecidamente llevar objetos de valor o dinero, o caminar solo de noche.. Un guía puede acompañarle en la salida.
Los lugares públicos, como playas y parques de atracciones, pueden ser muy turísticos y atraer a mucha gente, por lo que es aconsejable tener cuidado con sus objetos personales. Debe protegerse para evitar estos inconvenientes. Deje sus objetos de valor en un lugar seguro de su destino de vacaciones. En la playa, tenga cuidado con el riesgo de ahogamiento. Las aguas de esta región tienen una corriente bastante fuerte.
En general, Cabo Verde no es un país peligroso en sí mismo.. Algunos de estos riesgos están presentes en casi todas las regiones del mundo.